Cómo se construye la concepción del amor de pareja

• El enamoramiento dura entre 18 a 24 meses.
• La casa el colegio o el discurso de los padres son factores de socialización.

El factor social influye en la concepción del amor, aunque hay algunas ideas equivocadas que se deben desterrar para ir en la búsqueda de relaciones sanas y libres de violencia.

En la idea que nos hacemos sobre el amor en pareja, están involucradas facultades humanas, como la razón y las emociones. 

"El amor genuino, el amor verdadero, comienza con la admiración, se nutre de la razón, se sazona con la emoción y se sustenta con la voluntad", explica el psicoterapeuta familiar José Baldéon.

Según el especialista, pasada la etapa del enamoramiento, que dura entre 18 a 24 meses; lo sano y lo maduro es que la relación evolucione al compañerismo y se reconozcan los defectos y virtudes del otro. 

El amor no puede ser ciego ni dependiente. Argumentos como 'me sacrifico por mis hijos', no les hace un bien a ellos, al contrario, los vuelve más vulnerables a futuras parejas violentas y conflictivas.

“Si yo me quedo en la relación por mis hijos, voy a cargar frustración, voy a cargar amargura, y de alguna manera eso va a salpicar y dañar a mis hijos”.

El factor social también pesa en la elección de una pareja, las mujeres todavía arrastran concepciones erradas, que afortunadamente van quedando atrás, destaca el antropólogo Alex Huerta. 

“Se promovía desde un discurso colonial la idea de una mujer virginal. Ese tipo de imagen, casi santa, la hacía una víctima potencial de la agresividad que se le permitía al hombre”.

La educación en casa, en el colegio, o el discurso de los padres de familia, son agentes que influyen en las diferentes formas de amar, aunque en el caso de la mujer la vigilancia y la sanción social han sido más fuertes. 

“Un hombre que tiene varias chicas, es visto como un tigre o un ganador entre sus amigos; una chica que sale con varios hombres en un plano afectivo-sexual es criticada por la sociedad”.

Los hombres más racionales y las mujeres más emocionales, según la psicología, merecen que se respeten sus diferencias en igualdad de derechos. El bien común y la felicidad es un objetivo que nos involucra a todos.